Hoy viajamos a Madrid para charlar con Pilar Jiménez y Berta Jorde. Dos mujeres llenas de energía y serenidad a partes iguales que transmiten a la perfección esta filosofía en sus proyectos. Definitivamente Drommeri Interiorismo está llamado a ser uno de los estudios de interiorismo más rompedores de nuestro país.
Proyecto de Drommeri Interiorismo
Pero Berta y Pilar son mucho más que ese titular, en Drommeri son creadoras de espacios para todo tipo de personas que buscan un estilo diferente dentro de aires atemporales. Hablamos de un interiorismo que no pasa de moda, algo que trasciende a las tendencias más efímeras que encontramos hoy en día.
Creo que la mejor forma de definir su trabajo, es que en Drommeri diseñan espacios en los que te encantaría vivir, espacios soñados para vivirlos con los pies en el suelo. ¿Hay algo más tentador que eso?
El origen de Drommeri
P: En primer lugar, quiero que nos habléis de cómo surgió Drommeri. ¿Cómo una cordobesa y una burgalesa terminan embarcándose en esta aventura juntas?
R: DRÖMMERI surge de una manera muy orgánica.
Después de varios años en el mundo profesional, nos conocimos trabajando para el departamento de diseño e interiorismo de una gran empresa sueca del mundo del mobiliario y la decoración.
Tras un par de años trabajando juntas, a Pilar le surgió la oportunidad durante su baja de maternidad de ir desarrollando proyectos de manera freelance para empresas y particulares. Yo, paralelamente estaba en un momento de búsqueda de nuevos retos profesionales, así que un día poniéndolo en común decidimos intentarlo juntas y crear DRÖMMERI, palabra sueca cuyo significado se traduce como SOÑANDO.
P: ¿Cómo es la filosofía de Drommeri Interiorismo? ¿Cuál es ese nexo de unión que hace reconocibles vuestros proyectos?
R: Nuestra filosofía habla de un diseño para todos, un diseño asequible para la mayoría de las personas.
Se trata de acercar el mundo del interiorismo y la decoración a todo el público. Al final hemos crecido profesionalmente con esos valores y nuestra esencia habla de ello. Pensamos que un buen diseño tiene que responder tanto a nivel estético como funcional, y todo ello adaptado al presupuesto de cada tipo de cliente.
Proyecto de Drommeri Interiorismo
El proceso y el mimo
P: Contadnos cómo es el proceso creativo en vuestros proyectos ¿Dónde encontráis la inspiración de la que partir para trabajar texturas, materiales y acabados?
R: Lo primero que hacemos es charlar con el cliente, ver cuáles son sus gustos, captar palabras o sensaciones que nos transmiten, saber qué quieren que les transmita el espacio.
En función de toda esa información empezamos a crear un moodboad inicial para conceptualizar el proyecto. Una vez que tenemos eso definido, vamos detallando cada elemento. Analizamos cada material y como queremos que hablen los unos con los otros en cada parte del proyecto.
P: ¿El equilibrio entre una vivienda para vivir y un proyecto de precisión y alto contenido de diseño es difícil? ¿Cuál crees que es la clave para que el resultado sea el óptimo?
R: La clave para conseguirlo es trabajarlo desde la base y definir muy bien el proyecto en la fase de diseño.
Es algo en lo que hacemos especial hincapié. Empezamos a construir desde la distribución de los espacios, y desde ahí vas pensando y desarrollando cada detalle.
Si la distribución no cumple los requisitos previos, es muy complicado llegar al resultado deseado.
P: Hoy en día podemos afirmar que el cliente es muy exigente cuando contrata este tipo de servicios. Definitivamente del diseño de interiores se espera mucho más que un espacio bonito. El éxito de un proyecto está tan ligado a la funcionalidad como a la belleza. ¿Hasta qué punto es importante para el éxito conocer las rutinas, necesidades y día a día del cliente?
R: Para nosotras conocer al cliente es la base de todo, tanto para espacios públicos como privados.
Cuando nos enfocamos en proyectos de vivienda, preguntamos mucho hasta conocer las necesidades del cliente de manera súper detallada: hobbies, necesidades de almacenaje, si utilizan poco o mucho el espacio de cocina, y un sinfín de etc… Todas esas premisas de uso y funcionales, son las que determinan que el cliente disfrute de su casa. Cada uno de nosotros vivimos de manera diferente en nuestros hogares. A la hora de realizar un proyecto es donde debe comenzar la parte de diseño. La estética y la funcionalidad deben ir siempre de la mano. El cliente final debe sentir ese espacio suyo.Es por eso que siempre escuchamos tanto sus necesidades y sueños, como sus gustos estéticos y creamos espacios con los cuales se sientan identificados.
Con respecto a los proyectos de uso público, el propio diseño responde a cómo va a utilizar el usuario dicho espacio y los elementos con los que convive e interactúa en el día a día. Por eso siempre tenemos reuniones previas con nuestros clientes para saber sus expectativas con respecto al proyecto, conseguir el máximo de información posible por su parte para que todo esté integrado desde la base.
P: ¿Qué consejo daríais a alguien que está empezando en este mundo de la arquitectura y el diseño de interiores?
R: Que crea mucho en lo que hace y que se forme tanto a nivel estético como técnico en diferentes estudios.
El día a día de la obra es muy técnico y súper necesario para la buena ejecución de un proyecto, pero sobre todo para que lo que has imaginado y diseñado se haga realidad tal y como tú tenías en la cabeza.
P: Vuestro estilo apenas entiende de modas, trasciende a los gustos efímeros y pasajeros. De hecho, podríamos decir que precisamente esa es vuestra seña de identidad ¿Cuáles son las claves para diseñar un espacio atemporal?
R: Solemos huir de las modas porque precisamente son eso, modas, y acaban pasando en más o menos tiempo.
Al final se trata de hacer un diseño consciente y atemporal desde la base. Cuando escuchas y diseñas en base a las premisas marcadas conjuntamente con el cliente es cuando un espacio tiene sentido más allá de lo puramente estético.
Proyecto de Drommeri Interiorismo
El futuro y los sueños
P: Hablemos un poco del futuro, ¿creéis que uno de los pilares de esta profesión en los próximos años será la construcción, decoración e interiorismo sostenible?
R: Totalmente. Tanto para las marcas como para los proveedores, va a ser casi obligatorio desarrollar productos más sostenibles. El siguiente reto será hacerlo con menor impacto tanto en su producción, como en su destrucción a largo plazo.
La preocupación y necesidad por ser responsables con el medioambiente es algo con lo que ya no tenemos opción. Hay que hacerlo, y todos tenemos que poner nuestro granito de arena para conseguirlo.
El sector de la decoración y el interiorismo es un mundo ligado a las sensaciones, a los sentimientos, y cada vez más ponemos en valor todo lo que nos rodea.
P: ¿Cuál creéis que será la tendencia estrella de este año 2023?
R: Creemos que va a haber un contrapunto de tendencias entre esos espacios minimalistas cálidos, que transmiten paz y calma, con espacios de mucho color, divertidos, desenfadados e incluso de cierta fantasía que nos hagan abstraernos de nuestra realidad.
P: ¿Cuál es el proyecto soñado para Drommeri Interiorismo?
R: Hemos cumplido muchos, pero el más importante para nosotros es ver a las familias disfrutar en cada espacio creado para ellos.
Si tenemos que soñar diríamos trabajar en el desarrollo de los espacios para alguna cadena hotelera o marca de retail por la libertad creativa que supone un reto de este tipo.
Proyecto de Drommeri Interiorismo
P: Contadnos un truco decorativo que nunca os falla.
R: Saber jugar y mezclar elementos más asequibles con otras piezas icónicas o de diseño que eleven la estética del proyecto global.
P: ¿Hay algún arquitecto o diseñador que tengáis como referencia?
R: En el estudio nos encantan los proyectos de Neri&Hu como referentes en arquitectura entre otros muchos. Las líneas puras, sencillas y elegantes del diseño japonés nos encanta.
En cuanto a referentes en el diseño de mobiliario los diseños de Hans J. Wegner combinan esa estética atemporal y nórdica con la que nos sentimos muy representadas.
P: Un mueble o pieza de diseño que mejor represente a cada una.
R: Para Pilar es la silla Dudet de Cassina. Se trata de un diseño que equilibra a la perfección la parte estética y la comodidad del propio elemento. Está pensada desde un punto de vista sostenible, ya que está desarrollada con una espuma de poliuretano con un porcentaje de polioles derivados de fuentes orgánicas.
Berta en cambio, ha elegido la lámpara TMM de Miguel Milá. Soy muy fan de las lámparas, y es una de mis lámparas favoritas. Un diseño atemporal y versátil que combina con cualquier pieza, un diseño que no entiende de modas, ligero y cálido.
El café se ha terminado, siempre me sorprende la capacidad del tiempo para doblarse o expandirse en función de la experiencia del momento y lo enriquecedora de una charla. Ha pasado volando y confieso que me quedaría un par de horas más pero Berta y Pilar tienen que volver al trabajo y yo también.
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